jueves, 23 de septiembre de 2010




Miro a los gatos acicalàndose y reparo en el momento en que,limpiándose las patas, comienzan a tirar de las uñas una a una arrancando la antigua para dar paso a la nueva limpia,flexible y afilada y pienso que así deberíamos de poder hacer con los errores arrancarlos con los dientes y que la conciencia se quede brillante. Siempre se puede volver a empezar. Vivir asì, como la mujer de la foto de Uliano Lucas, abofeteando a la vida con una carcajada eterna y marcar nuestras propias normas.

2 comentarios:

  1. ¡Ajá! La foto me encanta, pero la chica me sugiere sofisticación y alegría fingida, pelín amarga incluso, ¿demasiada confianza en su belleza efímera?, lo contrario a la imagen natural y rutinaria del minino. Me gustan las rutinas, poca frustración va en ellas.No creo en las carcajadas eternas, existirían sin las penas previas? ¡Qué buena selección de fotos haces! Un beso.

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  2. Si,si,la mujer es la banalidad total y realmente le rodea un halo de tristeza como si la vida le estubiese prostituyendo. Por eso me parece que para poder renovarse se rìe del mundo. Quizàs la foto no es la mas acertada para acompañar el texto pero creo que si es pa` vivir amarguras casi mejor reirnos con ellas.

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